No se como disculparme por haber tardado tanto en colgar esté capítulo. Sinceramente la inspiración se fue al traste a la vez que me quedé sin tiempo porqué volví a empezar el curso. Aun así siento haber tardado tanto y espero que os guste el capítulo. Un beso.
— ¿Usted que cree?- preguntó James
antes de coger el libro para leer-El cumpleaños de muerte
Llegó octubre y un frío húmedo se
extendió por los campos y penetró en el castillo.
La señora Pomfrey suspiró resignada
sabiendo el trabajo que eso le supondría.
La señora Pomfrey, la enfermera, estaba
atareadísima debido a una repentina epidemia de catarro entre profesores y
alumnos.
El suspiro anterior se repitió
amplificado.
Su poción Pepperup tenía efectos
instantáneos,
— E muy divertidos.- siguió Fred.
— Realmente, es un ingrediente
importante en varios de nuestros productos.- comentó George.
aunque dejaba al que la tomaba echando
humo por las orejas durante varias horas.
Varios rieron recordando a sus
compañeros.
Como Ginny Weasley tenía mal aspecto,
Percy le insistió hasta que la probó.
— Plasta.- rugió Ginny aunque su mirada
era agradecida.
— Es mi trabajo.- le contestó el
muchacho despeinándola cariñosamente.
Molly miró con orgullo a su hijo mayor.
El vapor que le salía de debajo del
pelo producía la impresión de que toda su cabeza estaba ardiendo.
James miró con cariño a su esposa
mientras Harry se sonrojaba y Scorp sonreía con ternura. Ginny en cambio,
estaba completamente ruborizada de vergüenza y miraba mal el libro intentando
ignorar las risas de los demás.
Gotas de lluvia del tamaño de balas
repicaron contra las ventanas del castillo durante días y días; el nivel del
lago subió, los arriates de flores se transformaron en arroyos de agua sucia
Alice y Allie compusieron un puchero.
y las calabazas de Hagrid adquirieron
el tamaño de cobertizos.
— Guau- la exclamación se escapó de los
labios de Dudley.
El entusiasmo de Oliver Wood,
— Más bien obsesión.- rugió Alicia.
sin embargo, no se enfrió,
— Nosotros probamos tirándole al lago-
comentó George.
— Eso tampoco funcionó.- explicó Fred.
y por este motivo Harry, a última hora
de una tormentosa tarde de sábado, cuando faltaban pocos días para Halloween,
se encontraba volviendo a la torre de Gryffindor, calado hasta los huesos y salpicado
de barro.
— Yo trataría de evitar a Filch.-
aconsejó Remus.
— Por eso debes llevar siempre tu
capa.- le medio regañó su padre un poco molesto por el poco uso dado a su
legado familiar.
Aunque no hubiera habido ni lluvia ni
viento, aquella sesión de entrenamiento tampoco habría sido agradable. Fred y
George, que espiaban al equipo de Slytherin,
— Nosotros no espiábamos.- se indignó
Fred.
— Solo pasábamos por allí en el momento
oportuno.- explicó George cruzando los brazos sobre el pecho.
habían comprobado por sí mismos la
velocidad de las nuevas Nimbus 2.001. Dijeron que lo único que podían describir
del juego del equipo de Slytherin era que los jugadores cruzaban el aire como
centellas y no se les veía de tan rápido como volaban.
— Pues mejor no les enseñamos lo que
pueden hacer estas preciosidades.- comentó Gwen acariciando su saeta 100.
Harry caminaba por el corredor desierto
con los pies mojados, cuando se encontró a alguien que parecía tan preocupado
como él. Nick Casi Decapitado,
— ¿Por qué estaba preocupado?- preguntó
muy triste un león de primero.
— ¿Por culpa de quién?- rugió Neville.
— Le ayudaste ¿verdad?- le preguntó
Ginny mirándolo como diciera “y si no…”
Todo Gryffindor estaba indignado y
preocupado por su fantasma.
el fantasma de la torre de Gryffindor, miraba
por una ventana, murmurando para sí: «No cumplo con las características... Un
centímetro... Si eso...»
— Suerte que es un fantasma porqué sino
pensaría muy mal.- comentó Sus.
—Hola, Nick —dijo Harry.
— Anímale por favor.- suplicó Demelza.
— Tranquila Dem- le consoló Colin- Lo
hará- y miró a Harry advirtiéndole que lo pasaría muy mal si no acertaba.
—Hola, hola — respondió Nick Casi
Decapitado, dando un respingo y mirando alrededor.
Llevaba un sombrero de plumas muy elegante sobre su largo pelo ondulado, y una
túnica con gorguera, que disimulaba el hecho de que su cuello estaba casi completamente
seccionado. Tenía la piel pálida como el humo, y a través de él Harry podía ver
el cielo oscuro y la lluvia torrencial del exterior.
—Parecéis preocupado, joven Potter
—dijo Nick, plegando una carta transparente mientras hablaba, y metiéndosela
bajo el jubón.
—Igual que usted —dijo Harry.
— Buena salida.- rió Sirius.
— ¡Bah! —Nick Casi Decapitado hizo un
elegante gesto con la mano—, un asunto sin importancia...
— Embustero- le acusó
cariñosamente Denis.
No es que realmente tuviera interés en
pertenecer...
— Ahhhh…- soltó McGonagall que, igual
que sus alumnos, había estado preocupada por el fantasma- Es por eso.
— ¿Porqué es?- preguntaron los leones.
— Por algo que intenta cada diez años.-
contestó la profesora sonriendo enigmáticamente.
aunque lo solicitara, pero por lo visto
«no cumplo con las características». —A pesar de su tono displicente, tenía
amargura en el rostro
—Sea quién sea el idiota que le ha
rechazado lo va apagar.- prometió Sirius dando un puñetazo contra la mesa.
—. Pero cualquiera pensaría, cualquiera
—estalló de repente, volviendo a sacar la carta del bolsillo—, que cuarenta y
cinco hachazos
— ¿Cuarenta y cinco?- dijo Lia
llevándose las manos a los labios completamente horrorizada.
en el cuello dados con un hacha mal
afilada serían suficientes para permitirle a uno pertenecer al Club de
Cazadores Sin Cabeza.
— Por supuesto.- contestaron los
Gryffindor.
— Esto…- empezó Hannah- ¿Qué es eso del
Club de Cazadores Sin Cabeza?
— No lo sé- contestó Neville- Pero Nick
merecía entrar allí.
— Aunque sinceramente no sé porqué
quiere entrar en un grupo con ese nombre tan ridículo.- le apoyó Seamus.
—Desde luego —dijo Harry, que se dio
cuenta de que el otro esperaba que le diera la razón.
— ¡Tenía razón!- aseguraron todos los
leones indignados en nombre de su fantasma.
—Por supuesto, nadie tenía más interés
que yo en que todo resultase limpio y rápido,
— Sí, si te han de decapitar mejor con
una guillotina.- dijo completamente serio Lee Jordan.
y habría preferido que mi cabeza se
hubiera desprendido adecuadamente, quiero decir que eso me habría ahorrado
mucho dolor y ridículo.
— Y diversión.- agregó Fred.
— Aunque lo niegue le encanta asustar e
impresionar a los nuevos Gryffindors con su chapucera muerte.- añadió George.
Sin embargo... —Nick Casi Decapitado
abrió la carta y leyó indignado:
Sólo nos es posible admitir
cazadores cuya cabeza esté separada del correspondiente cuerpo. Comprenderá
que, en caso contrario, a los miembros del club les resultaría imposible
participar en actividades tales como los Juegos malabares de cabeza sobre el caballo o
el Cabeza Polo.
— Vale. ¿Juegos malabares de cabeza
sobre caballo y Cabeza Polo?- preguntó Terry levantando una ceja.
— La situación está desvariando de
forma rápida y peligrosa.- añadió su amigo Michael.
Lamentándolo profundamente,
— Si ya.- gruñó Minerva algo
enfurruñada.
por tanto, es mi deber
informarle de que usted no cumple con las características requeridas para
pertenecer al club. Con mis mejores deseos,
Sir Patrick Delaney-Podmore
— ¿Un fantasma puede sufrir dolor
físico?- le preguntó inocentemente Sirius a Remus.
— Lo averiguaré, Canuto, no te
preocupes.- contestó el licántropo.
Indignado, Nick Casi Decapitado volvió
a guardar la carta.
— ¡Un centímetro de piel y tendón
sostiene la cabeza, Harry! La mayoría de la gente pensaría que estoy bastante decapitado,
— ¿Bastante decapitado?- preguntó Padma
incrédula- O se está decapitado o no. Y Nick, siento decirlo, no está
técnicamente decapitado.
— Déjate de tecnicismos, hermanita.- le
rugió Pavarti cosa que hizo que Blaise la mirara mal.
— Reconócelo Patil- gruñó- Vuestro
fantasma no está calificado para ese grupo.
— Nadie ha pedido tu opinión, Zabinni.-
gritaron Seamus y Dean a la vez.
pero no, eso no es suficiente para sir
Bien Decapitado-Podmore.
Eso logró sacar algunas risas aunque el
ambiente seguía tenso.
Nick Casi Decapitado respiró varias
veces y dijo después, en un tono más tranquilo:
—Bueno, ¿y a vos qué os pasa? ¿Puedo
ayudaros en algo?
—No —dijo Harry—. A menos que sepa dónde
puedo conseguir siete escobas
Nimbus 2.001 gratuitas para nuestro
partido contra Sly..
— Como si necesitáramos esas escobas
para ganar.- dijo Oliver sulfurado por la falta de fe de su jugador.
El resto de la frase de Harry no se
pudo oír porque la ahogó un maullido estridente
— Ay no- gimieron todos los alumnos.
que llegó de algún lugar cercano a sus
tobillos. Bajó la vista y se encontró un par de ojos amarillos que brillaban
como luces.
Los petrificados temblaron
terriblemente mientras los de su alrededor les intentaban reconfortar sin
entender que les pasaba.
Era la Señora Norris, la gata
gris y esquelética que el conserje,
— Más esquelético y gris que su gata.-
agregó Zacharias Smith en voz baja.
Argus Filch, utilizaba como una especie
de segundo de a bordo en su guerra sin cuartel contra los estudiantes.
— Amargado.- murmuró Cormac.
—Será mejor que os vayáis, Harry —dijo
Nick apresuradamente—. Filch no está de buen humor.
— ¡Qué sorpresa!- ironizó Lee.
Tiene gripe y unos de tercero, por
accidente, pusieron perdido de cerebro de rana el techo de la mazmorra 5;
— ¿Por accidente?- los gemelos Weasley
levantaron la ceja al unísono con incredulidad- Nick no debería dedicarse a
arruinar nuestra reputación.- continuaron enfadados.
se ha pasado la mañana limpiando, y si
os ve manchando el suelo de barro...
— Te colgará de los pulgares.-
terminaron con aburrimiento los gemelos Prewett.
—Bien —dijo Harry, alejándose de la
mirada acusadora de la Señora Norris. Pero no se dio la prisa necesaria.
Argus Filch penetró repentinamente por un tapiz que había a la derecha de
Harry, llamado por la misteriosa conexión que parecía tener con su repugnante
gata,
El conserje fulminó a Harry con la
mirada mientras la señora Norris soltaba un maullido agudo y perturbador. Como
respuesta “Blackie” se apartó de Al para gruñirle a la gata.
a buscar como un loco y sin descanso a
cualquier infractor de las normas. Llevaba al cuello una gruesa bufanda de tela
escocesa, y su nariz estaba de un color rojo que no era el habitual.
— ¡Suciedad! —gritó,
— Por el amor de Merlín.- dijo Draco
girando los ojos con desprecio.
con la mandíbula temblando y los ojos
salidos de las órbitas, al tiempo que señalaba el charco de agua sucia que
había goteado de la túnica de quidditch de Harry—. ¡Suciedad y mugre por
todas partes! ¡Hasta aquí podíamos llegar! ¡Sígueme, Potter!
Así que Harry hizo un gesto de
despedida a Nick Casi Decapitado y siguió a Filch escaleras abajo, duplicando
el número de huellas de barro.
Algunos alumnos rieron con rencor,
otros solo con malicia.
Harry no había entrado nunca en la
conserjería de Filch.
— ¿Crees que si lo desheredo Lily se
enojará mucho?- le preguntó James a Sirius.
— Probablemente, pero no dejes que eso
te influya.-le contestó el prófugo.
Era un lugar que evitaban la mayoría de
los estudiantes, una habitación lóbrega y desprovista de ventanas, iluminada
por una solitaria lámpara de aceite que colgaba del techo, y en la cual persistía
un vago olor a pescado frito. En las paredes había archivadores de madera.
— Hogar, dulce hogar.- suspiraron los
gemelos Weasley, los Prewett y los merodeadores.
— Pensé que su hogar era mi oficina.-
comentó el director tratando de sonar ofendido.
— Que va, esa es nuestra sala común.-
contestaron todos sonriendo divertido.
Por las etiquetas, Harry imaginó que
contenían detalles de cada uno de los alumnos que Filch había castigado en
alguna ocasión. Fred y George Weasley tenían para ellos solos un cajón entero.
— ¿Uno?- preguntaron los Prewett algo
decepcionados.
— Ahora ya son tres.- les
tranquilizaron ellos.
Detrás de la mesa de Filch, en la
pared, colgaba una colección de cadenas y esposas relucientes.
— Las limpio a diario, nunca se sabe
cuando entraran en razón los profesores.- se deleitó el conserje haciendo
temblar a los de primero.
Todos sabían que él siempre pedía a
Dumbledore que le dejara colgar del techo por los tobillos a los alumnos.
— Y yo jamás voy a decir que sí.-
comentó el director clavando su mirada penetrante en el conserje.
Filch cogió una pluma de un bote que
había en la mesa y empezó a revolver por allí buscando pergamino.
—Cuánta porquería —se quejaba,
furioso—: mocos secos de lagarto silbador gigante..., cerebros de rana...,
intestinos de ratón...
— No se que es lo que da más asco de
los que ha dicho.- comentó Parvati con una mueca.
Estoy harto... Hay que dar un escarmiento...
¿Dónde está el formulario?
— Segundo cajón de la mesa.-
contestaron solícitos los gemelos Weasley.
Ajá...
Encontró un pergamino en el cajón de la
mesa y lo extendió ante sí, y a continuación mojó en el tintero su larga pluma
negra.
— De su primo más querido.- murmuró
Fabian.
— ¿Ese era el cuervo o el buitre?-
preguntó Guideon.
— El cuervo, el buitre era su hermano.-
les contestó Sus.
—Nombre: Harry Potter. Delito:
...
— Tener como capitán a un loco que vive
por el Quidditch.- Contestó Angelina.
— ¡Sólo fue un poco de barro! —dijo
Harry.
— Sólo es un poco de barro para ti,
muchacho, ¡pero para mí es una hora extra fregando! —gritó Filch.
— Allí algo de razón tiene.- le
concedió Luna.
Una gota temblaba en la punta de su
protuberante nariz—. Delito: ensuciar el castillo. Castigo propuesto:
...
— Colgarle de la mazmorra por los
tobillos.- contestaron todos los alumnos con aburrimiento.
Secándose la nariz, Filch miró con
desagrado a Harry, entornando los ojos. El muchacho aguardaba su sentencia
conteniendo la respiración. Pero cuando Filch bajó la pluma, se oyó un golpe
tremendo en el techo de la conserjería, que hizo temblar la lámpara de aceite.
— Peeves- en los labios de James se
formó una sonrisa.
—
Que gran casualidad.- comentó Sirius encantado.
— Conociendo a Nick, dudo que sea
casualidad.- contestó Remus con una tierna sonrisa
— ¡PEEVES! —bramó Filch, tirando la pluma
en un acceso de ira—. ¡Esta vez te voy a pillar, esta vez te pillo!
— ¿Y si lo consigues que harás?-
preguntó Lee con verdadera curiosidad.
— Echarlo del castillo.- contestó
rápidamente el conserje.
— Por favor, la historia nos dice que,
estadísticamente, ya es casi imposible echar un poltergeist de su casa,
teniendo en cuenta que Peeves es peor que cualquier de ellos no creo que puedas
encontrar ningún modo de echarlo.- comentó Braddock, un joven Slytherin de
segundo.- Me gusta la historia.- se explicó al ver como todos le miraban.
Y, olvidándose de Harry, salió de la
oficina corriendo con sus pies planos y con la Señora Norris galopando a
su lado. Peeves era el poltergeist del colegio, burlón y volador, que
sólo vivía para causar problemas y embrollos.
—O sea, como vosotros.- comentó gruñona
la señora Weasley señalando a sus hijos gemelos que ponían cara de angelitos.
A Harry, Peeves no le gustaba en
absoluto,
— Ni a ti ni a nadie.- comentó Neville.
— A mi sí me gusta.- salieron en su
defensa los merodeadores.
pero en aquella ocasión no pudo evitar
sentirse agradecido. Era de esperar que lo que Peeves hubiera hecho (y, a
juzgar por el ruido, esta vez debía de haberse cargado algo realmente grande)
sería suficiente para que Filch se olvidase de Harry.
— Sí, Filch prefiera a Peeves antes que
a nosotros.- lloriquearon los gemelos Weasley.
Pensando que tendría que aguardar a que
Filch regresara,
— Por el amor de Merlín, Harry, era el
momento perfecto de huir.- exclamó Sirius exasperado- Filch no se acordará de
ti si está ocupado con Peeves.
Harry se sentó en una silla apolillada
que había junto a la mesa.
— Pero registra el despacho por lo
menos.- exclamaron los Prewett.
Aparte del formulario a medio rellenar,
sólo había otra cosa en la mesa: un sobre grande, rojo y brillante con unas
palabras escritas con tinta plateada.
— Dime que, como mínimo leíste el
sobre.- le pidió James, Harry asintió tímidamente con la cabeza.
Tras echar a la puerta una fugaz mirada
para comprobar que Filch no volvía en aquel momento, Harry cogió el sobre y
leyó:
«EMBRUJORRÁPID»
Los sangre pura, es decir, los que
sabían que era eso, soltaron una sonora carcajada que hizo sonrojar a Filch.
Curso de magia por correspondencia para
principiantes
— Te he dicho mil veces que esos cursos
son una estafa.- suspiró Dumbledore mirando al conserje.
Intrigado, Harry abrió el sobre y sacó
el fajo de pergaminos que contenía. En la primera página, la misma escritura
color de plata con florituras decía:
¿Se siente perdido en el mundo
de la magia moderna? ¿Busca usted excusas para no llevar a cabo sencillos
conjuros? ¿Ha provocado alguna vez la hilaridad de sus amistades por su torpeza
con la varita mágica? ¡Aquí tiene la
solución!
— Sí, ahora se reirán de ti por haberte
dejado estafar y no por no saber hacer magia.- comentó con lógica Blaise.
«Embrujorrápid» es un curso
completamente nuevo, infalible,
— Claro que sí- se burlaron los
alumnos.
de rápidos resultados y fácil de
estudiar. ¡Cientos de brujas y magos se han beneficiado ya del método
«Embrujorrápid»!
— Me como la mesa si es cierto.-
comentó Sirius.
— Pues ya puedes empezar, -dijo Remus-
Al fin y al cabo, cientos de brujas y magos trabajan en Embrujorrápid para
desplumar a los pobres squip ergo se han beneficiado de ese método. Bon appétit.-
Sirius le fulminó con la mirada mientras todos reían.
La señora Z. Nettles, de
Topsham, nos ha escrito lo siguiente:
«¡Me había olvidado de todos los
conjuros, y mi familia se reía de mis pociones! ¡Ahora, gracias al curso
“Embrujorrápid”, soy el centro de atención en las reuniones, y mis amigos me
ruegan que les dé la receta de mi Solución Chispeante!»
— Para enviarla a san Mungo.- murmuró
Louis burlón.
El brujo D.J Prod, de Didsbury
escribe
«Mi mujer decía que mis
encantamientos eran una chapuza, pero después de seguir durante un mes su
fabuloso curso Embrujorrápid, ¡la he convertido en una
vaca!,
— Hombre, yo no niego que debe haber
sido divertido.- comentó James pero al ver la mirada de su esposa prosiguió- Aunque
si eres capaz de hacer algo así mejor que te divorcies.
Gracias Embrujorrápid,»
Extrañado, Harry hojeó el resto del
contenido del sobre. ¿Para qué demonios quería Filch un curso de Embrujorrápid?
¿Quería esto decir que no era un mago de verdad? Harry leía «Lección primera:
Cómo sostener la varita. Consejos útiles»,
Todos los alumnos rompieron a reír,
incluso Molls, que reprobaba que se rieran del conserje, tuvo que morderse los
labios.
cuando un ruido de pasos arrastrados le
indicó que Filch regresaba. Metiendo los pergaminos en el sobre, lo volvió a
dejar en la mesa y en aquel preciso momento se abrió la puerta.
— ¡Bien!- exclamaron los merodeadores.
— Por los pelos.- fue el suspiro de los
gemelos.
Filch parecía triunfante.
En ese momento, su aspecto era más bien
alicaído.
— ¡Ese armario evanescente era muy
valioso!
Scorp se tensó de golpe pero en cuando
sintió como Al le pasaba la mano por los hombros, Allie le cogía la mano y Rose
le susurraba un “tranquilo, amigo” sonrió.
—decía con satisfacción a la Señora Norris—.
— Por si nos hacía falta una prueba más
de que está loco.- comentó Sirius.
— Amigo… Tú hablas con los perros.- le
recordó James burlón.
Esta vez Peeves es nuestro, querida.
Sus ojos tropezaron con Harry y luego
se dirigieron como una bala al sobre de Embrujorrápid que, como Harry
comprendió demasiado tarde, estaba a medio metro de distancia de donde se
encontraba antes.
—Fallo de principiante.- dijeron los
gemelos Prewett negando con la cabeza.
La cara pálida de Filch se puso de un
rojo subido. Harry se preparó para acometer un maremoto de furia. Filch se
acercó a la mesa cojeando, cogió el sobre y lo metió en un cajón.
— ¿Has... lo has leído? —farfulló.
— Qué va.- ironizaron todos los
alumnos.
—No —se apresuró a mentir.
Filch se retorcía las manos nudosas.
—Si has leído mi correspondencia
privada..., bueno, no es mía..., es para un amigo...,
— ¡¿Filch?! ¡¿Un amigo?!- la voz de
Blaise sonó demasiado alta a causa de la sorpresa genuina que experimentó en
ese momento.
— Cien puntos menos para Slytherin.-
rugió el conserje más rojo que el estandarte de Gryffindor.
— Según “Hogwarts, la historia” el
director Dexter Fortescue quitó a los conserjes el poder de otorgar o quitar
puntos puesto a que el conserje de esa época aceptaba sobornos de los alumnos y
hacía ganar la casa que más pagaba.- explicó Padma rápidamente consiguiendo que
Filch se pusiera morado.
— ¿Veis porqué me trae loco?- les susurró
Blaise a sus amigo deleitándose con la expresión de gallina ahogada del
conserje.
— Veinte puntos más para Ravenclaw.-
anunció Snape con una sonrisa satisfecha.
— Buen trabajo, Pad.- le felicitó Terry
contento por los puntos y cometió el error de darle unas palmaditas amistosas
en la espalda ganándose tal mirada de un Slytherin que retrocedió con miedo.-
Tu admirador/admirado da miedo.
— Cállate Terry.- susurró sonrojada
Padma.
— Ey Theo.- susurró Blaise- Tú te
sueles juntar con los Ravenclaw’s en la biblioteca los fines de semana
¿verdad?- preguntó.
— Sí, somos los únicos que hay allí y
la señora Pince nos pidió que nos sentáramos juntos. Son listos, no tienen
prejuicios, los entiendo y lo que es más raro, ellos….- contestó
— Si me dices que te comprenden los
llevaré a San Mungo, a la sección de enfermos mentales crónicos.- comentó
divertido Draco.
— No, pero ni los asusta ni los
intimida ni les extraña como soy.- contestó Theo.
— ¿Y entonces porqué no te sientas con
ellos durante la semana?- preguntó curioso Draco.
— Digamos que hay cierta persona que me
viene a fastidiar la tranquilidad cuando estudio en la biblioteca durante la
semana.- contestó Theo desviando su mirada hacia Daphne que en ese momento reía
alguna gracia de Astoria.- ¿Que era lo que querías Blaise?- preguntó sonrojado
al ver como le miraban sus amigos.
— Saber que hay exactamente entre ese y
Padma.- la agresividad con la que dijo “ese” casi asustó a sus amigos.
— Solo es su mejor amigo.- se apresuró
a asegurar Theo temiendo por la vida de su amigo águila.
— Lo vigilaré de cerca por si acaso.-
murmuró mirando al chico de forma casi depredadora.- Y que no se atreva a
volver a hacerla sonrojar.- terminó inconciente de que él era la causa del
color rojizo de las mejillas de la Ravenclaw.
es que claro..., bueno pues...
Harry lo miraba alarmado; nunca había
visto a Filch tan alterado. Los ojos se le salían de las órbitas y en una de
sus hinchadas mejillas había aparecido un tic que la bufanda de tejido escocés
no lograba ocultar.
—Muy bien, vete... y no digas una
palabra... No es que..., sin embargo, si no lo has leído... Vete, tengo que
escribir el informe sobre Peeves... Vete…
— Para librarse de un castigo de Filch
este tiene que sospechar que has descubierto que es squip.- comentó Lee- Nota
archivada.
Asombrado de su buena suerte,
— Sobretodo teniendo en cuenta los
antecedentes.- comentó Ron.
Harry salió de la conserjería a toda
prisa, subió por el corredor y volvió a las escaleras. Salir de la conserjería
de Filch sin haber recibido ningún castigo era seguramente un récord.
— Nop.- dijeron indignados los gemelos
Weasley- Aunque tal vez lo sea para vosotros, simples mortales.
— ¡Harry! ¡Harry! ¿Funcionó?
— Sabía que fue Nick.- exclamó Remus
satisfecho.
— Creía que a estas alturas ya te
habrías dado cuenta de que eres omnipotente Lunático.- bromeó Sirius.
Nick Casi Decapitado salió de un aula
deslizándose. Tras él, Harry podía ver los restos de un armario grande, de color negro y
dorado, que parecía haber caído de una gran altura.
—Convencí a Peeves para que lo
estrellara justo encima de la conserjería de Filch —dijo Nick emocionado
— No debió costarle mucho trabajo.-
comentó Sus.
— Peeves saldría volando tan pronto
como lo mencionó.- concordó Lee.
—; pensé que eso le podría distraer.
— ¿Ha sido usted? —dijo Harry,
agradecido—. Claro que funcionó, ni siquiera me van a castigar. ¡Gracias, Nick!
Se fueron andando juntos por el
corredor. Nick Casi Decapitado, según notó Harry, sostenía aún la carta con la
negativa de sir Patrick.
— Olvídate de ese fantoche y su tonto
grupo.- murmuraron los Gryffindors.
—Me gustaría poder hacer algo para
ayudarle en el asunto del club —dijo Harry.
Nick Casi Decapitado se detuvo sobre
sus huellas, y Harry pasó a través de él.
— Mala idea.- dijo Seamus con un
escalofrío.
Lamentó haberlo hecho; fue como pasar
por debajo de una ducha de agua fría.
Todos los del gran comedor tuvieron un
escalofrío.
—Pero hay algo que podríais hacer por
mí —dijo Nick emocionado—. Harry, ¿sería mucho pedir...? No, no vais a
querer...
— Claro que sí.- dijeron todos los
leones mirando amenazantemente a Harry.
— ¿Qué es? —preguntó Harry.
—Bueno, el próximo día de Todos los
Santos se cumplen quinientos años de mi muerte —dijo Nick
— Y de allí el título- dedujo Sirius.
— Gran deducción Sherlock.- contestó
burlón Remus.
— Como siempre Watson.- le devolvió
Sirius dejando a Remus de una pieza.
— ¿Des de cuanto te interesa la
literatura muggle?- preguntó el licántropo.
— Desde que tengo que estar escondido a
una mugrosa casa donde no se puede hacer nada.- contestó Sirius.
Casi Decapitado, irguiéndose y poniendo
aspecto de importancia.
— ¡Ah! —exclamó Harry, no muy seguro de
si tenía que alegrarse o entristecerse—.
— Gran pregunta la verdad.- comentó
Rose.
— Si lo celebran será para alegrarse
¿no?- comentó Al.
— O para conmemorarlo, hay veces que se
recuerda una ocasión triste.- le rebatió Scorp.
— Si queréis lo estudiaremos pero ahora
prosigamos con la lectura.- les pidió con paciencia Allie.
¡Bueno!
—Voy a dar una fiesta en una de las
mazmorras mas amplias. Vendrán amigos míos de todas partes del país. Para mí
sería un gran honor que vos pudierais asistir. Naturalmente, el señor Weasley y
la señorita Granger también están invitados.
— ¿Y a nosotros porqué nos mete?-
preguntó Ron sulfurado.
— ¿Me hubieses hecho ir solo?- preguntó
horrorizado Harry.
— Te acompañaría a mi muerte pero hay
límites incluso para nuestra amistad, Harry.- le respondió Ron.
Pero me imagino que preferiréis ir a la
fiesta del colegio. —Miró a Harry con inquietud.
— Sí- murmuraron los tres.
—No —dijo Harry enseguida—, iré...
— Bien dicho.- le felicitó su padrino.
— ¡Mi estimado muchacho! ¡Harry Potter
en mi cumpleaños de muerte! Y…—dudó, emocionado—. ¿Tal vez podríais mencionarle
a sir Patrick lo horrible y espantoso que os resulto?
— Eso es difícil teniendo en cuenta que
es amable y encantador.- comentó Demelza.
— Bueno, uno siempre puede inspirarse
en el barón sanguinario.- le contestó Collin.
—Por supuesto —contestó Harry.
Nick Casi Decapitado le dirigió una
sonrisa.
•
• •
— ¿Un cumpleaños de muerte? —dijo
Hermione entusiasmada,
— Mala señal- murmuraron los gemelos
Weasley.
cuando Harry se hubo cambiado de ropa y
reunido con ella y Ron en la sala común—. Estoy segura de que hay muy poca
gente que pueda presumir de haber estado en una fiesta como ésta. ¡Será fascinante!
— Hermione lo considera fascinante…-
empezó Fred.
— Mala señal.- le apoyó George.
— ¿Para qué quiere uno celebrar el día
en que ha muerto? —dijo Ron,
— No celebrar, conmemorar.- le recordó
Bill.
que iba por la mitad de su deberes de
Pociones y estaba de mal humor—. Me suena a aburrimiento mortal.
— Deberíais hacerme más caso.- comentó
el muchacho.
La lluvia seguía azotando las ventanas,
que se veían oscuras, aunque dentro todo parecía brillante y alegre. La luz de
la chimenea iluminaba las mullidas butacas en que los estudiantes se sentaban a
leer, a hablar, a hacer los deberes o, en el caso de Fred y George Weasley, a
intentar averiguar qué es lo que sucede si se le da de comer a una salamandra
una bengala del doctor Filibuster.
— ¿CÓMO SE OS OCURRIÓ UNA BARBÁRIE
ASÍ?- para sorpresa de muchos el que gritó fue Al que estaba completamente
horrorizado.
— Era una broma.- se disculpó George.
— Deberías empezar a diferenciar entre
broma y crueldad.- comentó duramente Hagrid quién también estaba indignado.
— No exageres.- murmuró Fred.
— El pobre animal no podía defenderse y
le hicieron comer una bengala. ¿Tú sabes cuanto le debió doler?- comentó Al.-
Que alguien te queme por dentro no es gracioso.
Fred había «rescatado» aquel lagarto de
color naranja, espíritu del fuego, de una clase de Cuidado de Criaturas Mágicas
y ahora ardía lentamente sobre una mesa, rodeado de un corro de curiosos.
Ahora, los gemelos y los curiosos
miraban hacia la mesa avergonzados.
Harry estaba a punto de comentar a Ron
y Hermione el caso de Filch y el curso Embrujorrápid, cuando de pronto
la salamandra pasó por el aire zumbando, arrojando chispas y produciendo
estallidos mientras daba vueltas por la sala.
— No puedo creer que no salvarais a ese
pobre animal.- les comentó Rose al trío enfadada.
La imagen de Percy riñendo a Fred y
George hasta enronquecer,
— Al menos hay alguien con un poco de
empatía y conciencia en Gryffindor.- murmuró Minerva con aprobación.
la espectacular exhibición de chispas
de color naranja que salían de la boca de la salamandra, y su caída en el
fuego, con acompañamiento de explosiones,
Allie entrecerró los ojos triste por el
pobre animal.
hicieron que Harry olvidara por
completo a Filch y el curso Embrujorrápid. Cuando llegó Halloween, Harry
ya estaba arrepentido de haberse comprometido a ir a la fiesta de cumpleaños de
muerte. El resto del colegio estaba preparando la fiesta de Halloween; habían
decorado el Gran Comedor con los murciélagos vivos de costumbre; las enormes
calabazas de Hagrid habían sido convertidas en lámparas tan grandes que tres
hombres habrían podido sentarse dentro,
La boca de Dudley formó una perfecta O.
y corrían rumores de que Dumbledore había
contratado una compañía de esqueletos bailarines para el espectáculo.
— Eran increíbles.- murmuró Blaise con
nostalgia. Ron, Harry y Hermione suspiraron con pesar.
—Lo prometido es deuda —recordó
Hermione a Harry en tono autoritario—. Y tú le prometiste ir a su fiesta de cumpleaños
de muerte.
— Pero yo no así que no sé porqué me
obligaste a ir.- murmuró Ron.
Así que a las siete en punto, Harry,
Ron y Hermione atravesaron el Gran Comedor, que estaba lleno a rebosar y donde
brillaban tentadoramente los platos dorados y las velas, y dirigieron sus pasos
hacia las mazmorras.
Los tres suspiraron al unísono.
También estaba iluminado con hileras de
velas el pasadizo que conducía a la fiesta de Nick Casi Decapitado, aunque el
efecto que producían no era alegre en absoluto, porque eran velas largas y
delgadas, de color negro azabache, con una llama azul brillante que arrojaba
una luz oscura y fantasmal incluso al iluminar las caras de los vivos.
— Es una fiesta de muerteaños hecha por
y para fantasmas.- comentó con lógica Terry.
La temperatura descendía a cada paso
que daban. Al tiempo que se ajustaba la túnica, Harry oyó un sonido como si mil
uñas arañasen una pizarra.
— Música supongo.- comentó Luna.
— ¿A esto le llaman música? —se quejó
Ron. Al doblar una esquina del pasadizo, encontraron a Nick Casi Decapitado
ante una puerta con colgaduras negras.
—Queridos amigos —dijo con profunda
tristeza—, bienvenidos, bienvenidos... Os agradezco que hayáis venido...
— Que salutación más cordial.- comentó
Sus con sorna.
Hizo una floritura con su sombrero de
plumas y una reverencia señalando hacia el interior. Lo que vieron les pareció increíble. La
mazmorra estaba llena de cientos de personas transparentes, de color blanco
perla. La mayoría se movían sin ánimo por una sala de baile abarrotada,
bailando el vals al horrible y trémulo son de las treinta sierras de una
orquesta instalada sobre un escenario vestido de tela negra. Del techo colgaba una
lámpara que daba una luz azul medianoche. Al respirar les salía humo de la
boca; aquello era como estar en un frigorífico.
— Debió ser impresionante.- comentó
Neville- Aunque por la descripción agradezco no haber sido invitado.
— ¿Damos una vuelta? —propuso Harry,
con la intención de calentarse los pies.
— Cuidado no vayas a atravesar a nadie
—advirtió Ron,
— Eso seria de los más descortés.-
murmuró Molly.
— Y desagradable.- añadió Arthur.
algo nervioso, mientras empezaban a
bordear la sala de baile. Pasaron por delante de un grupo de monjas fúnebres,
de una figura harapienta que arrastraba cadenas y del Fraile Gordo, un alegre fantasma
de Hufflepuff que hablaba con un caballero que tenía clavada una flecha en la frente.
— ¿El hijo de Guillermo Tell?-
preguntaron con sorna los gemelos Prewett.
Harry no se sorprendió de que los demás
fantasmas evitaran al Barón Sanguinario, un fantasma de Slytherin, adusto, de
mirada impertinente y que exhibía manchas de sangre plateadas.
— Era él el que los evitaba.-
contestaron los Slytherin intentando proteger a su fantasma.
—Oh, no —dijo Hermione, parándose de
repente—. Volvamos, volvamos, no quiero hablar con Myrtle la Llorona.
—
Corred,- suplicaron todas las chicas- Tenemos suficiente de ella en la
vida real como para tener que leer sus llantos.
— ¿Con quién? —le preguntó Harry,
retrocediendo rápidamente.
— Ronda siempre los lavabos de chicas
del segundo piso —dijo Hermione.
— ¿Los lavabos?
—Sí. No los hemos podido utilizar en
todo el curso porque siempre le dan tales llantinas que lo deja todo inundado.
De todas maneras, nunca entro en ellos si puedo evitarlo, es horroroso ir al
servicio mientras la oyes llorar.
— Realmente horrible.- comentó Cho.
— Mira quién fue ha hablar de llantos.-
comentó cruelmente Romilda.
— Cho tiene motivos por los que llorar,
Myrtle no.- la defendió, para sorpresa de muchos Hermione.
— Gracias Granger.- murmuró Cho tan
sorprendida como el resto.
— ¡Mira, comida! —dijo Ron.
— Eso sí que me sorprende.- comentó
Sirius.
Al otro lado de la mazmorra había una
mesa larga, cubierta también con terciopelo negro. Se acercaron con entusiasmo,
pero ante la mesa se quedaron inmóviles, horrorizados.
Varios miraron el libro con interés.
El olor era muy desagradable. En unas
preciosas fuentes de plata habíaunos pescados grandes y podridos; los pasteles,
completamente quemados, se amontonaban en las bandejas; había un pastel de
vísceras con gusanos, un queso cubierto de un esponjoso moho verde y, como
plato estrella de la fiesta, un gran pastel gris en forma de lápida funeraria,
decorado con unas letras que parecían de alquitrán
En el comedor los alumnos estaban de un
tono verde muy poco saludable y nadie se atrevía a hablar por miedo a vomitar
aunque si miraban al trío con absoluta compasión.
y que componían las palabras:
Sir Nicholas de
Mimsy-Porpington,
fallecido el 31 de octubre de
1492.
— Murió el mismo día que ellos.- reparó
en un susurro Harry mirando de reojo a sus padres con tristeza absoluta.
Harry contempló, asombrado, que un
fantasma corpulento se acercaba y, avanzando en cuclillas para ponerse a la altura
de la comida, atravesaba la mesa con la boca abierta para ensartar por ella un
salmón hediondo.
— ¿Le encuentras el sabor de esa
manera? —le preguntó Harry.
—Casi —contestó con tristeza el
fantasma, y se alejó sin rumbo.
— Pobrecillo.- se compadeció Lavander.
— Debe de ser horrible no poder comer
nunca.- le apoyaron todos los Weasley.
—Supongo que lo habrán dejado pudrirse
para que tenga más sabor —dijo Hermione con aire de entendida, tapándose la
nariz e inclinándose para ver más de cerca el pastel de vísceras podrido.
— Puaj, ¿Hermione, eso era necesario?-
pidió Ginny.
— Se pueden querer ver de cerca muchas
cosas pero un pastel de vísceras podrido y con gusanos es una rara elección.-
comentó Seamus.
—Vámonos, me dan náuseas —dijo Ron.
Pero apenas se habían dado la vuelta
cuando un hombrecito surgió de repente de debajo de la mesa y se detuvo frente a ellos,
suspendido en el aire.
—Hola, Peeves —dijo Harry, con
precaución.
— Siempre necesaria cuando se trata con
Peeves.- completó el muchacho.
A diferencia de los fantasmas que había
alrededor, Peeves el poltergeist no era ni gris ni transparente. Llevaba sombrero de
fiesta de color naranja brillante, pajarita giratoria y exhibía una gran
sonrisa en su cara ancha y malvada.
— ¿Picáis? —invitó amablemente,
ofreciéndoles un cuenco de cacahuetes recubiertos de moho.
— Sí, y si se pueden acompañar de salsa
agriada por el tiempo mejor.- ironizaron los Prewett.
—No, gracias —dijo Hermione.
—Os he oído hablar de la pobre Myrtle
—dijo Peeves,
— Ay Merlín- suspiraron todos.
moviendo los ojos—. No has sido muy
amable con la pobre Myrtle. —Tomó aliento y gritó—: ¡EH! ¡MYRTLE!
—No, Peeves, no le digas lo que he
dicho, le afectará mucho —susurró Hermione,
— Decir que le afectará mucho es un
eufemismo.- comentó Ginny.
desesperada—. No quise decir eso, no me
importa que ella...
Todas las chicas alzaron una ceja en dirección a Hermione.
Eh, hola, Myrtle.
Hasta ellos se había deslizado el
fantasma de una chica rechoncha.
— No lo digas delante de ella.- pidió
Luna.
Tenía la cara más triste que Harry
hubiera visto nunca, medio oculta por un pelo lacio y basto y unas gruesas
gafas de concha.
— Que deberías abstenerte de comentar
en su presencia.- aseguró Hannah.
— ¿Qué? —preguntó enfurruñada.
— ¿Cómo estás, Myrtle? —dijo Hermione,
fingiendo un tono animado—. Me alegro de verte fuera de los lavabos.
— ¿Le estás preguntando a Myrtle la
Llorona por su estado de ánimo?- preguntó Astoria con incredulidad.
Myrtle sollozó.
— Buena respuesta.- comentó Daphne.
—Ahora mismo la señorita Granger estaba
hablando de ti —dijo Peeves a Myrtle al oído,
maliciosamente.
—Sólo comentábamos..., comentábamos...
— No te esfuerces- le dijo Tracey-
Digas lo que digas conseguirá tener una excusa para romper a llorar.
lo guapa que estás esta noche —dijo
Hermione, mirando a Peeves.
Myrtle dirigió a Hermione una mirada
recelosa.
—Te estás burlando de mí —dijo, y unas
lágrimas plateadas asomaron inmediatamente a sus ojos pequeños, detrás de las
gafas.
— ¿Los fantasmas pueden llorar?-
preguntó con curiosidad Dudley.
— Te aseguró yo que sí.- suspiró Padma
con pesar.
—No, lo digo en serio... ¿Verdad que
estaba comentando lo guapa que está Myrtle esta noche? —dijo Hermione, dándoles
fuertemente a Harry y Ron con los codos en las costillas.
—Sí, sí.
—Claro.
—No me mintáis —dijo Myrtle entre
sollozos, con las lágrimas cayéndole por la cara, mientras Peeves, que estaba
encima de su hombro, se reía entre dientes—. ¿Creéis que no sé cómo me llama la
gente a mis espaldas? ¡Myrtle la gorda! ¡Myrtle la fea! ¡Myrtle la desgraciada,
la llorona, la triste!
— Solo la llorona.- aseguraron todas
las chicas a la vez.
—Se te ha olvidado «la granos» —dijo
Peeves al oído.
Myrtle la Llorona estalló en
sollozos angustiados y salió de la mazmorra corriendo. Peeves corrió detrás de
ella, tirándole cacahuetes mohosos y gritándole: «¡La granos! ¡La granos!»
— Al menos le encontró un uso a esos
cacahuetes.- comentó James.
— ¿No es muy cruel?- preguntó Petunia.
— Sí- le respondió su hermana- Pero
Myrtle siempre está buscando excusas para llorar, una vez pasó dos días
llorando porqué alguien la atravesó sin querer.
— ¡Dios mío! —dijo Hermione con
tristeza.
Nick Casi Decapitado iba hacia ellos
entre la multitud.
— ¿Os lo estáis pasando bien?
— ¡Sí! —mintieron.
— Era de educación.- se disculpó Ron
ante la mirada de su madre.
—Ha venido bastante gente —dijo con
orgullo Nick Casi Decapitado—. Mi Desconsolada Viuda ha venido de Kent.
— ¿Si está tan desconsolada porqué no
vive con él?- preguntó con tristeza Denis.
— Porqué hay una maldición sobre ellos
que les impide vivir juntos.- le contestó Braddock- Se lo puso el que mandó que
decapitaran a Nick, un mago muy poderoso, ya que la Viuda era su prometida
según, el acuerdo con el que llegó con sus padres, pero ella decidió fugarse
con Nick.
— ¿Te sabes la historia de todos los
fantasmas de Hogwarts?- le preguntó Theo con curiosidad.
— No, el Barón Sanguinario y la Dama
Gris se me resisten.- contestó el chico con auténtica frustración.
Bueno, ya es casi la hora de mi
discurso, así que voy a avisar a la orquesta.
La orquesta, sin embargo, dejó de tocar
en aquel mismo instante. Se había oído un cuerno de caza y todos los que
estaban en la mazmorra quedaron en silencio, a la expectativa.
—Ya estamos —dijo Nick Casi Decapitado
con cierta amargura.
A través de uno de los muros de la
mazmorra penetraron una docena de caballos fantasma, montados por sendos
jinetes sin cabeza.
Todos los Gryffindor fruncieron el ceño
a la vez.
Los asistentes aplaudieron con fuerza;
Harry también empezó a aplaudir, pero se detuvo al ver la cara fúnebre de Nick.
Los caballos galoparon hasta el centro
de la sala de baile y se detuvieron encabritándose; un fantasma grande que iba
delante, y que llevaba bajo el brazo su cabeza barbada y soplaba el cuerno,
descabalgó de un brinco, levantó la cabeza en el aire para poder mirar por
encima de la multitud,
— Fantoche.- murmuró Lily con odio.
con lo que todos se rieron,
— Ineptos sin personalidad.- gruñó Sus
enfadada.
y se acercó con paso decidido a Nick
Casi Decapitado, ajustándose la cabeza en el cuello.
— ¡Nick! —dijo con voz ronca—, ¿cómo
estás? ¿Todavía te cuelga la cabeza?
— ¡Maleducado!- graznó McGonagall.
Rompió en una sonora carcajada y dio a
Nick Casi Decapitado unas palmadas en el hombro.
—Bienvenido, Patrick —dijo Nick con
frialdad.
— ¡Vivos! —dijo sir Patrick, al ver a
Harry, Ron y Hermione. Dio un salto tremendo pero fingido de sorpresa y la
cabeza volvió a caérsele.
— Torpe.- le acusó Tonks con el pelo
rojo.
— Ejem- le susurró Remus- Nos estás
quitando el diálogo a los Gryffindors.
— Nick me cae bien- contestó la
peli-rosa- Y ese tío es imbécil.
La gente se rió otra vez.
—Muy divertido —dijo Nick Casi
Decapitado con voz apagada.
— Espero que eso sea sarcasmo.- murmuró
Sirius.
— ¡No os preocupéis por Nick! —gritó
desde el suelo la cabeza de sir Patrick—.
¡Aunque se enfade, no le dejaremos
entrar en el club!
— Es demasiado bueno para tu tonto
club.- gruñó Demelza.
Pero quiero decir..., mirad el amigo...
—Creo —dijo Harry a toda prisa, en
respuesta a una mirada elocuente de Nick— que Nick es terrorífico y esto...,
mmm...
— Se agradece el esfuerzo.- comentó
Neville.
— ¡Ja! —gritó la cabeza de sir
Patrick—, apuesto a que Nick te pidió que dijeras eso.
— ¡Si me conceden su atención, ha
llegado el momento de mi discurso! —dijo en
voz alta Nick Casi Decapitado,
caminando hacia el estrado con paso decidido y colocándose bajo un foco de luz
de un azul glacial.
»Mis difuntos y afligidos señores y
señoras, es para mí una gran tristeza...
Pero nadie le prestaba atención.
— Que gente más descortés.- se exclamó
la señora Weasley.
Sir Patrick y el resto del Club de
Cazadores Sin Cabeza acababan de comenzar un juego de Cabeza Hockey y la gente
se agolpaba para mirar.
— Es horrible que le hagan eso en su
propia fiesta de cumpleaños.- murmuró Lia muy triste.
Nick Casi Decapitado trató en vano de
recuperar la atención, pero desistió cuando la cabeza de sir Patrick le pasó al
lado entre vítores.
— Lameculos sin cerebro.- insultó
Sirius a los invitados del fantasma.
Harry sentía mucho frío, y no digamos
hambre.
—No aguanto más —dijo Ron, con los
dientes castañeteando, cuando la orquesta volvió a tocar y los fantasmas volvieron al
baile.
—Vámonos —dijo Harry.
— Tenéis que quedaros a animar a Nick.-
se exclamaron todos lo Gryffindor.
Fueron hacia la puerta, sonriendo e
inclinando la cabeza a todo el que los miraba, y un minuto más tarde subían a toda prisa por el
pasadizo lleno de velas negras.
— Quizás aún quede pudín —dijo Ron con
esperanza, abriendo el camino hacia la escalera
del vestíbulo.
— Yo no contaría con ello.- murmuraron
los gemelos Weasley.
Y entonces Harry lo oyó.
—... Desgarrar... Despedazar...
Matar…
— Otra vez esa agradable voz.- ironizó
Lee.
Fue la misma voz, la misma voz fría,
asesina, que había oído en el despacho de
Lockhart. Trastabilló al detenerse, y
tuvo que sujetarse al muro de piedra. Escuchó lo más atentamente que pudo, al
tiempo que miraba con los ojos entornados a ambos lados del pasadizo pobremente
iluminado.
—Harry, ¿qué...?
—Es de nuevo esa voz... Callad un
momento...
—... deseado... durante tanto
tiempo...
— ¿El qué?- preguntó Luna.
— Probablemente el hecho de matar.- le
contestó Remus.
— ¡Escuchad! —dijo Harry, y Ron y
Hermione se quedaron inmóviles, mirándole.
—... matar... Es la hora de matar...
—Pero que manía- murmuró Sirius- Si
casi es tan psicópata como mi prima.
La voz se fue apagando. Harry estaba
seguro de que se alejaba... hacia arriba. Al mirar al oscuro techo, se apoderó de él una
mezcla de miedo y emoción. ¿Cómo podía irse hacia arriba? ¿Se trataba de un
fantasma, para quien no era obstáculo un techo de piedra?
— Claro, porqué para los fantasmas es
muy fácil matar a alguien.- ironizó Draco.
— Por no hablar de desgarrarlo y
despedazarlo, eso se les da muy bien, sus no matericas manos son perfecta para
esta función- afirmó con sarcasmo Astoria.
— ¡Por aquí! —gritó, y se puso a correr
escaleras arriba hasta el vestíbulo. Allí era imposible oír nada, debido al
ruido de la fiesta de Halloween que tenía lugar en el Gran Comedor. Harry
apretó el paso para alcanzar rápidamente el primer piso. Ron y Hermione lo
seguían.
—Harry, ¿qué estamos...?
— Estáis siguiendo una voz sin cuerpo
que anuncia que quiere matar de forma dolorosa a cualquiera que se acerque.-le
facilitó la información Molly con una sonrisa encantadora que no engañaba a
nadie.
— ¡Chssst!
Harry aguzó el oído. En la distancia,
proveniente del piso superior, y cada vez más débil, oyó de nuevo la voz:... huelo
sangre... ¡HUELO SANGRE!
— Te has cortado… ¡Te has cortado!- la
imitaron los gemelos Prewett.
— Más bien debía haberse mordido la
lengua.- murmuró Harry causando sorpresa a los de su alrededor.
El corazón le dio un vuelco.
— Claro, llevas escuchando a una voz
misteriosa anunciando que quiere cometer asesinatos atroces y solo la sigues
pero si dice que huele sangre, eso es otra cosa.- comentó Scorp asintiendo con
la cabeza.
— ¡Va a matar a alguien! —gritó,
— ¿Cómo lo has descubierto?- preguntaron
sorprendidos los gemelos Weasley- No es como si lo hubiese estando anunciando
desde hace un buen rato.
y sin hacer caso de las caras
desconcertadas de Ron y Hermione, subió el siguiente tramo saltando los
escalones de tres en tres, intentando oír a pesar del ruido de sus propios
pasos. Harry recorrió a toda velocidad
el segundo piso, y Ron y Hermione lo seguían jadeando. No pararon hasta que
doblaron la esquina del último corredor, también desierto.
—Harry, ¿qué pasaba? —le preguntó Ron,
secándose el sudor de la cara. Yo no oí nada...
— O tal vez lo hice pero no lo entendí-
dejó caer el pelirrojo extrañando a los autores.
Pero Hermione dio de repente un grito
ahogado, y señaló al corredor.
— ¡Mirad!
Delante de ellos, algo brillaba en el
muro. Se aproximaron, despacio, intentando ver en la oscuridad con los ojos
entornados. En el espacio entre dos ventanas, brillando a la luz que arrojaban
las antorchas, había en el muro unas palabras pintadas de más de un palmo de
altura.
LA CAMARA DE LOS SECRETOS HA SIDO
ABIERTA.
TEMED, ENEMIGOS DEL HEREDERO.
— No podían tener un año tranquilo,
claro que no.- renegó Lily por lo bajo.
— ¿Qué es lo que cuelga ahí debajo?
—preguntó Ron, con un leve temblor en la voz.
Al acercarse más, Harry casi resbala
por un gran charco de agua que había en el suelo. Ron y Hermione lo
sostuvieron, y juntos se acercaron despacio a la inscripción, con los ojos
fijos en la sombra negra que se veía debajo. Los tres comprendieron a la vez lo
que era, y dieron un brinco hacia atrás.
— ¿El qué?- exigieron saber los dos
Potter mayores.
La Señora Norris,
Filch soltó un gemido ahogado que logró
incluso que los alumnos sintieran algo de lástima por él.
la gata del conserje, estaba colgada
por la cola en una argolla de las que se usaban para sujetar antorchas. Estaba
rígida como una tabla, con los ojos abiertos y fijos.
Ginny tembló por lo que Harry se giró
hacia ella, estaba pálida y se mordía los labios intentando reprimir las
lágrimas. Harry solo pudo pasar el brazo por su hombro, discretamente, y
hacerle una señal a Ron para que animase a su hermana.
— Ey- comentó el pelirrojo acariciando
el pelo de Ginny- No temas pequeña, eso ya pasó y nadie te va acusar de nada.-
para sorpresa del chico, Ginny se le tiró a los brazos sollozando y atrayendo
la atención de todos los del gran comedor.
— ¿Qué sucede Ginny?- preguntó Bill con
preocupación.
— Na… na…ada.- contestó la chica
todavía abrazada a su hermano más cercano.
— Tú no lloras por nada.- contestaron
los gemelos Weasley.- Eres la más fuerte de nosotros.
— ¿Es por lo del…- preguntó Percy
compartiendo una mirada con Ron.
— Más o menos- contestó Ron-
Presionarla ahora no pasará nada.
— ¿Qué le ocurre?- exigió Charlie
ignorando lo dicho por Ron.
— Algo que sabréis al final del libro-
contestó Arthur con firmesa- Estoy de acuerdo con Ron que lo mejor es no
forzarla a contestar ninguna pregunta.
— No puedes pretender que deje a mi
hermanita llorar sin averiguar la razón.- gruñó Bill.
— Prefieres hacerle recordar una
experiencia traumática que, de todas formas, ya saldrá en el libro.- le
contestó Percy.
— Estoy bien, en serio.- contestó Ginny
apartándose de Ron y limpiándose las lágrimas con rudeza- Siento la escena.-
añadió con una sonrisa.
— No lo hagas.- pidió Luna.
— ¿El qué?- pidió Ginny.
— Sonreír sin estar feliz, no me agrada
que la gente haga eso, les duele más que si lloran.- comentó Luna con tristeza.
— No lo haré más.- contestó Ginny
dándole un beso en la mejilla.
Durante unos segundos, no se movieron.
Luego dijo Ron:
—Vámonos de aquí.
— Buena idea.- comentó Alastor
satisfecho.
—No deberíamos intentar... —comenzó a
decir Harry, sin encontrar las palabras.
—Hacedme caso —dijo Ron—; mejor que no
nos encuentren aquí.
— Al fin hay alguien cuerdo en este
grupo.- suspiró el ex-auror.
Pero era demasiado tarde.
Un suspiro de exasperación se escapó de
los labios de todos horrorizados por la mala suerte del trío.
Un ruido, como un trueno distante,
indicó que la fiesta acababa de terminar. De cada extremo del corredor en que
se encontraban, llegaba el sonido de cientos de pies que subían las escaleras y
la charla sonora y alegre de gente que había comido bien. Un momento después,
los estudiantes irrumpían en el corredor por ambos lados. La charla, el
bullicio y el ruido se apagaron de repente cuando vieron la gata colgada.
Harry, Ron y Hermione estaban solos, en medio del corredor, cuando se hizo el silencio
entre la masa de estudiantes, que presionaban hacia delante para ver el truculento
espectáculo.
Luego, alguien gritó en medio del
silencio:
— ¡Temed, enemigos del heredero! ¡Los
próximos seréis los sangre sucia!
— Que persona más agradable.- murmuró
Justin.
Era Draco Malfoy,
— ¡Qué raro!- ironizó Ernie.
que había avanzado hasta la primera
fila. Tenía una expresión alegre en los ojos, y la cara, habitualmente pálida,
se le enrojeció al sonreír ante el espectáculo de la gata que colgaba inmóvil.
— ¿En serio?- preguntó Scorp algo
molesto.
— Odio que me mire así.- murmuró Draco.
— Bien chicos.- dijo el director- A
dormir, mañana seguiremos con más.
A regañadientes los alumnos se
dirigieron a las habitaciones a través de las
recién aparecidas puertas. Scorp se apresuró a sumarse a sus padres
hacía la reservada para las serpientes no sin antes desear buenas noches a sus
amigos. Al se fue, discutiendo sobre Quidditch con los Wood hacía las de los
leones mientras que Hannah, Allie, Molls y Louis se iban con los tejones a sus
salas. Rose se quedó mirando como sus iban a dormir.
— Ven conmigo- le dijo Luna tomándola de
la mano- No tienes porqué sentirte perdida, al fin y al cabo eres una de las
nuestras.- le sonrió.
— Gracias Tía Luna.- contestó la chica
devolviéndole la sonrisa.
Llegaron a la sala, con cómodos
sillones y las paredes ellas de libros, estaba bastante abarrotada. Luna
dirigió su mirada hacia todos los de allí evaluándoles.
— Vas a quinto, ¿verdad?- le preguntó a
lo que Rose asintió tímidamente con la cabeza. Luna se dirigió entonces hacía
Padma, Terry y Michael que estaban hablando en un rincón.
— Hola Luna- la saludó Padma con
simpatía.- Era Rose, ¿verdad?
— Sí, Padma.- le respondió la chica
contenta.
— ¿La conoces?- preguntó Luna
sorprendida.
— La conoceré.- contestó Rose- A los
tres, de hecho. Aunque no muy bien.- añadió.
— Supongo que porqué Scorp es sobrino
de Theo- intervino Terry.
— ¿Sois amigos de Theodore Nott?-
preguntó Luna sorprendida.
— Supongo- le contestó Michael- Solemos
reunirnos todos los fines de semana para estudiar e investigar.
— Realmente no sé que hace en
Slytherin, es mucho más Ravenclaw que la mayoría de águilas.- comentó Padma.
Rose apretó los labios fuertemente.
— ¿Os sentáis con nosotros?- les
preguntó Terry a las dos chicas. Rose miró a Luna y como está ya se estaba
sentando la imitó.
— Gracias.- dijo con algo de rubor. Aun
así, la vergüenza se pasó a los dos minutos cuando empezó a debatir con Michael
sobre las capacidades mágicas y el mal ojo del nombre 13.
Scorp entró a las salas de Slytherin
sin que se le notaran los nervios aún así, su decoración, tan familiar para él,
le ayudaron a calmar los nervios. Vio a sus padres sentados junto con Theo,
Blaise y Daphne en un mullido sillón del medio de la sala y se dirigió hacia
ellos. O lo intentó porqué Crabbe le paró el paso.
— ¡Quiero que vuelva!- siseó intentando
que Draco no le oyera- ¡Haz que vuelva!
— Cuando aprendas a construir frases
con un complemento directo que facilite al oyente entenderte hablaremos.-
contestó Scorp. Para su enojo Crabbe, que no había entendido la frase, no le
dejó pasar.
— ¡Hazle volver!- le volvió a exigir.
— Si te refieres a tu novia invisible,
se ha fugado con un trol de las montañas,- le dijo el chico con fingida
comprensión- lo siento pero no le superabas ni en apariencia ni en
inteligencia.
— ¡Goyle!- murmuró el muchacho.
— No, él no es un trol,- dijo Scorp
supuestamente horrorizado- es bastante peor.
— Quiero que vuelva Goyle- le suplicó.
— Y yo que Lils vuelva a dirigirme la
palabra pero ni tu ni yo conseguiremos lo que queremos.- le contestó el rubio.
— Hazlo volver o si no…- amenazó
alzando los puños.
— ¿Qué? Me darás un motivo para
humillarte públicamente antes de enviarte a la enfermería a base de maldiciones
transfiguradotas?- le preguntó, Crabbe bajó los puños y dio un paso hacia atrás
con miedo.- Eso me parecía a mi.
— ¿No vienes Scorp?- la voz de Astoria sobresaltó
a Crabbe.
— Claro mamá- dijo Scorp y se fue con
ellos, ignorando completamente al otro chico que permaneció inmóvil unos
segundos antes de fulminar a Scorp con la mirada y marcharse a dormir dando un
portazo.
holaaaaaaaaa, en encantó el cap estubo super-mega-hiper-genial jejeje, pero como pudiste dejarlo así????
ResponderEliminarcontinua pronto porfaaaaaaaaaaaaaa
entiendo que ahora mismo debes estar muy ocupada yo tambien tengo problemas para actualizar mis historias asique te entiendo pero como Fan que esta loca pr tu historia te suplico que no tarde tanto porfiiiiiiisssssssssss
en lo ultimo que has escrito me has solucionado una duda que tenía de si Scor estaba con Lily Potter y ya me lo has resuelto muchaassss gracias
un besazo wapa y no te rindas nunca que esta es la mejor historia que e leido
Pdo: van a aparecer pronto otros chicos del futuro???? es que me encantaría verlos
ahora si que me despido un kissssssssss
Me alegra que te gustase el capitulo. Intentaré continuar pronto pero no puedo prometer nada ya que estoy muy liada. Los del futuro aparecerán después de cada libro así que todavía falta para que lleguen aun así vendrán todos. Un beso para ti también.
EliminarAiruna
Hola me encanto el capitulo aunque me dejaste con el gusanito de la curiosidad jeje, espero ver que aparezcan algunos chicos/as del futuro para animar un poco la cosa jaja, espero ver como reaccionaran cuando sepan que Voldy estaba controlando a Ginny y aun así ella lucho y logro volver en ella en algunas ocasiones le dio pelea a Voldy, eso la marco pero la hizo mas fuerte de lo que ya era, cuando Lockhart intento hechizarlos espero que las chicas dejen de verlo como el príncipe azul y lo vean como es un farsante y embaucador ganando premios que no se merece en absoluto (me cae gordo), lo del basilisco y como Harry acabo con el con la espada de Godric Gryffindor, ademas que se sepa que Voldy es un mestizo en toda regla y al que siguen los sangre puras es una mentira pero de las gordas vale que sea heredero de Slytherin pero Harry tambien lo es de Gryffindor y no va por hay matando a la gente porque le molesta siendo como ellos, es decir, Voldy mata a mestizos y nacidos de muggles lo cual es un poco estúpido ya que el es igual que ellos vale que tuviera una infancia terrible en el orfanato pero eso no le da derecho a matar al primero que se le cruce por el camino vamos si todos lo hiciéramos pufff muchas muertes XD, bueno me desvió del tema perdón XP, bueno espero que no tardes mucho en actualizar digo tu cuando puedas actualiza pero si puedes no tardes mucho ya que siempre me dejas con la curiosidad de que pasara, bueno en cuanto a lo que te dije sobre poner como ocurrieron los ataques del basilisco a los petrificados poniendo lo que paso, como por ejemplo en el caso de Mione digo si te parece bien la idea sino déjalo, bueno no me enrollo mas un saludo, mucho animo y que te valla todo muy bien
ResponderEliminarHola,
EliminarGinny fue muy valiente cuando se enfrento a Voldemort y la gente sabrá verlo. En cuanto a Lockhart, no sabes las ganas que tengo unas ganas locas de desenmascararlo pero antes nos reiremos un poco a su costa gracias a Ronnie y Blaise. Lo de Voldy no tiene escusa, es el mayor hipócrita de la historia de la magia y su infancia no le puede servir de escusa aunque lo pasara fatal y fuera muy triste y todo eso (que tampoco es del todo verdad ya que por lo visto se divertía torturando a sus compañeros de orfanato). Como tu dices, todos a veces queremos matar a algún idiota que nos molesta o enfrenta pero no por eso lo hacemos. Puede ser buena idea lo de los petrificados, Hermione, Collin, etc pensando en el ataque aunque no sé si lo sabré escribir, todo dependerá de si me sale o no aunque es muy buena idea yo no soy muy buena en tragedia/horror.
Un saludo y un beso para ti tamién y muchas gracias por comentar.
comtinaula porfa esta muy beuna en serio esta historia y me gustaria ver como se toman los weasley lo que le paso a Ginny y como se toman sirius, remus, lily y james cuando harry se enfrente al basilisco
ResponderEliminarContinuarla al continuaré seguro, eso que no te preocupe. A los Weasley y Potter todavía les quedan varios infartos, y solo en este libro.
EliminarUn beso.
me ha encantado la historia por favor, sigue haciendo mas espero ansiosa un capitulo nuevo
ResponderEliminarEsta genial =D
ResponderEliminarCada vez me gusta màs el trato que se tienen Draco, Blase y Theo ^^. Y no me imaginaba que a Theo le gustaba estudiar con los Ravenclaws. Aunque bueno me alegra que un Slytherin se haya dado la oportunidad de convivir con personas de las otras casas ^^
Me gusto la parte en que Scorp enfrenta a Crabbe y lo amenaza. Scorp le enseño quien manda! =D
Ojala puedas poner el siguiente capitulo pronto ^^. Seguro que todos nosotros y tambièn ellos estan ansiosos de leerlo ^^. Aunque al principio tendremos que aguantar las tonterias del idiota de Lockhart u.u. Por una parte me da risa porque no puedo creer que diga tantas tonterias delante de Mcgonagall y Dumbledore XD
¡Hola!
ResponderEliminarSoy Azu :).
Primero...¡perdón por no haber comentado en el anterior!, pero estoy muy liada con el instituto -.-, creo que tengo que aprender a hacer magia y lanzarle un maleficio a los profes. Sí, es buena idea xD.
Bueno, me los he leído los dos que llevaba colgando seguidos. Y, como siempre,mi querida Nur, han sido maravillosos. No puedo extenderme mucho, tengo que empezar con mi mal fin de semana estudiando Biología. Puto examen..., pero como siempre, espero más visitantes futuros. Lo sé, soy muuuuy pesada. Pero no más que el 'simpático' de mi hermano, que me mete prisa para que deje el ordenador.
Siento haberte aburrido y...
¡Muuuuuchos besos!
hola!! podes actualiza pronto por favor!! me encanta tu historia!!!
ResponderEliminarxoxo
http://www.potterfics.com/historias/125750
ResponderEliminarMalas noticias, amiga mia. Tu historia a sido plagiada otra vez...
Ya le he puesto un comentario
Un beso, actualiza pronto
LilySnape23
hola como dice el comentario de arriba alguien en potterfics te esta plagiando
ResponderEliminarhttp://www.potterfics.com/historias/125783 LEELO!!
ResponderEliminarhola oye deberías leer estoy http://www.potterfics.com/historias/125783/capitulo-1/
ResponderEliminarhola! es la primera vez que escribo un comentario en una historia, asi que no se como va a salir. Primero de todo, me encanta tu historia! En serio, tu historia es fantástica. Y una cosa, estaba releyendo capítulos pasados y me he dado cuenta de que parece que hay algo entre Susan y Ernie,y también entre Alice y Fred (me encanta esta última pareja, pero creo que no existen fanfics de ellos.), pero desde el capítulo de "Los «sangre sucia» y una voz misteriosa" no ha aparecido nada. ¿ No va a pasar nada entre ellos? Simple curiosidad, obviamente eso no es lo esencial de la historia. Bueno, creo que me he extendido demasiado, suele pasar!! Besos, y sube la conti cuanto antes!! ( sin presiones!jaja )
ResponderEliminarHola!! podes actualizar por favorr!! me encanta tu historia y quiero leer ya un nuevo capitulo!!
ResponderEliminarxoxo
HEY ACTUALIZALO PRONTO....
ResponderEliminar1 mes y 2 semanas!!!! NO ME TORTURES MAS!!!! :´)
ResponderEliminarya no nos TORTURES a TODOS y actualiza porfis
ResponderEliminarACTUALIZA POR FAVOR QUEREMOS LEER OTRO CAPITULO YA!!
ResponderEliminarPorfa ya sube!!!
ResponderEliminarporfa actualiza
ResponderEliminareres una genia enserio
ResponderEliminar